La “Endoterapia arbórea” es un Terapia sanitaria para realizar tratamientos fitosanitarios sobre arbolado, que consiste en la inyección directa al sistema vascular de la planta de productos fitosanitarios y/o complejos nutritivos.
Frente a los tratamientos tradicionales destaca por:
- La ausencia de pulverización de productos químicos en el ambiente y por lo tanto es inocuo para la salud de las personas y animales.
- Evitan las aplicaciones de producto indiscriminadas.
- Los tratamientos son específicos y sólo actúan contra aquellos agentes patógenos (plagas y enfermedades) que se alimentan de materia vegetal respetando los que no lo hacen.
Funciona a partir de la capacidad de flujo de savia que hay en el interior de los tejidos vasculares (básicamente el xilema). Este, viene determinado en función de dos parámetros: la respiración y la fotosíntesis.
Características:
• Eficacia prolongada de al menos un año, evitando así posibles resistencias al producto.
• Técnica de nulo impacto ambiental.
• Actúa contra los insectos fitófagos, respetando así a sus enemigos naturales, es decir, sólo elimina los insectos que se alimentan de la planta causándole daños.
• Uso extendido a cualquier tipo de árbol ornamental, ya sea contra plagas o enfermedades criptogámicas.
Entre sus principales ventajas se encuentran las siguientes:
• Método de aplicación cerrado:
a) Uso más específico y controlado de los productos químicos.
b) Reducción-eliminación de la contaminación ambiental.
c) Posibilidad de tratamientos en zonas urbanas eliminando efectos colaterales sobre ciudadanos y mobiliario.
• Mayor eficacia de las materias activas aplicadas por inyección al distribuirse por un mayor porcentaje de tejidos. Sobre todo en casos de ineficacia de los medios de aplicación tradicionales, por el comportamiento del agente causal de la plaga o patología.
• Mayor persistencia del producto en el interior del árbol y, por tanto, mayor período de eficacia de los tratamientos. Con una sola aplicación es suficiente en muchos casos para corregir la carencia o solucionar el problema que el árbol presente en su fitopatología, manteniéndose en el mismo durante al menos un año.
• Rapidez de acción: El tiempo que tarda el árbol en absorber cualquiera de estas inyecciones, oscila entre 30 segundos y 15 minutos, dependiendo del estado del árbol y la variedad del mismo.
• Limpieza: Mediante este sistema, evitamos la contaminación medio ambiental, especialmente en el caso del tratamiento de plagas, donde habitualmente se utiliza el método de aspersiones.
• Eficacia: Al inyectar el principio activo directamente en la savia del árbol, aseguramos una distribución uniforme del producto y en la cantidad adecuada para conseguir una reacción positiva e inmediata.
• Especialmente indicado para árboles singulares.